El Villarreal dejó otra vez seco al Madrid
Pocas veces a lo largo de la temporada dos equipos empatan a cero goles en los dos enfrentamientos que han tenido. El Villarreal puede decir con orgullo que ha dejado sin marcar goles al Madrid contra ellos
Puede que la Liga no esté tan resuelta como algunos pensaban tras la primera vuelta. El Real Madrid suma ocho puntos posibles de los últimos 15 mostrando una gran fatiga y sobretodo una falta de gol que en otros momentos de la temporada sobraban. Con Benzema lesionado, era el día de que otros tiraran del carro en el aspecto goleador en el Estadio de La Cerámica enfocándose principalmente esa misión en el reaparecido Gareth Bale y en el explosivo Vinicius Junior.
Ambos lo intentaron con todas sus fuerzas, pero Rulli y el árbitro jugaron un papel decisivo para que el Madrid no haya podido perforar en 180 minutos esta temporada la portería del 'Submarino amarillo'. Si en la ida, el equipo blanco se quejó de un penalti sobre Nacho, en esta ocasión Vinicius, y por partida doble, fue víctima se sendas agresiones en el área que terminaron en advertencia para los defensores, pero nada de penalización.
El brasileño tuvo por ese lado sus opciones de gol, mientras que el galés se encontró con un soberbio Rulli que sacó hasta tres grandes disparos marca de la casa terminando uno estrellado contra el larguero. El díscolo Bale demostró que motivado puede hacer daño a los rivales e incluso seguir siendo útil para un equipo que sólo ha anotado un gol en los últimos tres partidos.
Bien es cierto que el conjunto dirigido por Carlo Ancelotti pudo merecer más porque no sólo Bale tuvo sus opciones, sino que en el tiempo de descuento Jovic estrelló una vaselina contra el larguero y Nacho no atinó a empujarla al fondo de las mallas en el rechace siendo ambas ocasiones claras. El Madrid se va con la sensación de haber perdido dos puntos ante un Villarreal que está ganando fiabilidad y que espera poder opositar a los puestos europeos al final de temporada.
Los blancos siguen liderando la Liga, pero su colchón de puntos con el Sevilla se reduce tras este encuentro a cuatro puntos. El Real Madrid tiene la prueba del algodón este próximo martes ante el Paris Saint Germain y Ancelotti es el primero que lo sabe. Si hay derrota, la primera gran crisis de la temporada aflorará, mientras que si hay empate o victoria muchos podrán justificar los últimos pobres resultados. Recordemos que los franceses ganaron su último partido con gol en el minuto 93 de Mbappé. La suerte también cuenta para la confianza.