¿Es inevitable una final Madrid vs Barça en la Copa de basket?
El Real Madrid apareció en Granada en su peor momento de la temporada y pese a todo venció al Breogán en un partido más que serio de los de Laso. El Barça tiene un cuadro más complicado
Hace poco más de un año, la NBA convulsionó por la mezcla de James Harden, Kevin Durant y Kyrie Irving en los Brooklyn Nets situando al equipo neoyorquino como gran favorito al título. Ese tridente apenas ha podido disputar 16 partidos juntos de más de un centenar posibles dejando claro que era imposible que se creara una química entre ellos. Durant ha sufrido lesiones importantes, Harden cayó en los Play-Offs de la pasada temporada en el peor momento e Irving no ha jugado en casi toda esta temporada por su negativa a vacunarse.
Así las cosas, Brooklyn decidió cortar por lo sano y volver a la raíz del proyecto que Irving y Durant diseñaron cuando unieron sus caminos en 2019. Ambos decidieron dejar la comodidad y el estrellato de los Celtics y los Warriors, respectivamente, para intentar hacer campeón por primera vez a unos Nets que parecen haber ganado muchas piezas valiosas con el cambio. El equipo dirigido por Steve Nash se ha hecho con un Ben Simmons que es uno de los mejores jugadores del mundo con cancha abierta, con un tirador letal como Seth Curry y a un pívot veterano y sólido como Andre Drummond.
Harden se marcha a Philadelphia en busca del amor fraternal que no ha tenido en las inmediaciones de la Gran Manzana. Nada más llegar allí la prensa aireó sus problemas de sobrepeso, luego sus salidas nocturnas y finalmente le señalaron como una lacra defensiva en el engranaje de los Nets. De esos reproches nadie en Brooklyn salió a defenderle, algo que dolió sobremanera a un Harden que apenas se perdió partidos en la temporada y media que ha estado salvo en los últimos Play-Offs.
La cosa no ha terminado nada bien con un Kevin Durant que rechazó elegirle en su equipo del All-Star y que hasta prefirió a un 'tronco' como Rudy Gobert antes que su ex compañero, con quien también compartió vestuario en los Thunder. LeBron James, en esa confección del equipo All-Star, se partió de risa ante la cara de circunstancias de su ex compañero, quien parece haber tenido ración suficiente de Harden para el resto de su carrera.
Harden intentará limpiar su imagen en Philadelphia de la mano de un Joel Embiid con el que formará un pick and roll temible. 'La Barba' podría tener la oportunidad de vengarse de Durant y compañía en los Play-Offs, puesto que ambos equipos son ahora favoritos para alcanzar la final de la Conferencia Este con permiso de los Milwaukee Bucks. Los Sixers llevan sin ganar un anillo desde 1983 y sin alcanzar una final desde 2001. Quizá sea hora de que la gente recuerde que son uno de los equipos con más historia de la competición y un Harden motivado seguro que puede conseguirlo.