Hay partido. Marc Márquez puede soñar con alcanzar esta temporada los nueve títulos mundiales de Valentino Rossi. El piloto catalán comprobó en primera persona que su Honda tiene un grandísimo potencial y que a lomos de ella podrá pelear por grandes resultados. Acabó quinto en su primera carrera en Qatar tras un invierno complicado donde tuvo que superar sus problemas de visión doble y también continuar con la rehabilitación de un húmero que ahora sí parece ser cosa del pasado.

Márquez hizo un resultado para pensar en el Mundial puesto que el vigente campeón, Fabio Quartararo, terminó noveno confirmando un gran paso atrás de la Yamaha en este inicio de Mundial como dejaron ver los test. La victoria se la llevó el inesperado Enea Bastianini, un italiano de la fábrica de Rossi, que deberá sacar partido al follón que hay montado en Ducati, donde hasta sus propios pilotos chocan entre sí como evidenciaron Jorge Martín y Peco Bagnaia.

El italiano fue el más zorro en una carrera que dominó Pol Espargaró hasta que los neumáticos se le vinieron abajo. Bastianini entró con Brad Binder y su KTM pisándole los talones. El equipo austríaco tiene que confirmar si estas prestaciones van a ser continuas o son flor de un día. Nadie duda de que la Ducati es la moto más rápida, la Honda la más equilibrada y la KTM la que tiene el mejor paso por curva. Suzuki y Joan Mir aspiran a robarle a los centroeuropeos esa vitola tras un sexto puesto que no supo tampoco nada mal.

La cuestión que otea el horizonte es saber si vamos a seguir viendo esta temporada a esta versión de Márquez sin cafeina o el catalán irá aumentando su confianza y prestaciones conforme pasen las carreras. Por el momento, la buena noticia para el de Honda es que su moto responde con creces y que además hay un campeonato más que igualado por delante sin saberse aún quienes son los verdaderos favoritos a robarle el título a Quartararo. Cuidado con su compañero Pol Espargaró, quien está muy crecido tras este inicio.

En apenas dos semanas en Indonesia, el campeonato de MotoGP pondrá las cosas más claras a todos los contendientes. Tras la primera carrera sin Valentino Rossi en 25 años, podemos decir que Honda está mucho mejor de lo esperado, que Yamaha está en un agujero de difícil salida y que las Ducati deberán serenarse antes de pensar en un candidato a ser campeón. Empieza uno de los mundiales más divertidos e igualados.