El naufragio de los Lakers que LeBron no puede evitar
El equipo angelino está fuera de los puestos de Play-Offs por primera vez desde el inicio de la temporada NBA. Ni la mejor versión de LeBron James les puede salvar
Malos tiempos para ser aficionado de los Lakers. LeBron James se las prometía muy felices reuniendo este verano en su misma plantilla a una constelación de veteranos All-Stars encabezados por Russell Westbrook, Carmelo Anthony, Dwight Howard y Rajon Rondo. 'El Rey' esperaba que con ese grupo de jugadores hambrientos por ganar un anillo y con la compañía de Anthony Davis, los angelinos dominasen con mano de hierro una Conferencia Oeste donde oficialmente están haciendo el ridículo.
Si no existiese el Play-In que la NBA inauguró el año pasado, los Lakers ya no tendrían opciones matemáticas de jugar en la postemporada. Aún les quedan unas pocas, pero se tienen que dar una serie de carambolas nada fáciles para que puedan pelear en esa repesca que la competición inventó entre el séptimo y décimo de la Conferencia para meter a los dos mejores en Play-Offs. Un equipo en plena reconstrucción como los San Antonio Spurs les acaba de pasar en la clasificación relegándoles al undécimo puesto con un balance de 31 triunfos y 44 derrotas.
Les quedan siete partidos por disputar y seis de ellos serán contra equipos que ya están clasificados en la Conferencia Oeste para el Play-Off y con nota. Para ganarse un pase del que ahora no dependen de sí mismos deberán ganar en las próximas dos semanas en canchas tan complicadas como las de Phoenix, Golden State o Utah. El equipo ha sufrido y de lo lindo la ausencia de un Anthony Davis que se espere que fuerce para intentar darle la vuelta a una temporada para olvidar.
Debacle defensiva
Los angelinos comenzaron con mucho músculo ofensivo, pero pronto todo el mundo se dio cuenta de que en defensa eran uno de los peores equipos de la competición. Sus rivales empezaron a castigarles con un juego rápido y con mucho extra-pass que dejaba al aire el escaso compromiso defensivo de sus estrellas. Los focos se pusieron sobre el bajo rendimiento de un Westbrook que ya ni puede llevar a sus familiares al pabellón por las duras críticas de los aficionados.
Pero el base no es el único problema de un equipo descompensado a todas luces y donde LeBron parece estar cuidando más de sus propias estadísticas y récords que de conseguir triunfos. De poco sirve que sea la mejor temporada anotadora del jugador a sus 37 años con 30 tantos por partido si su equipo acumula noche tras noche un bochorno defensivo llegando a encajar una media de 112.4 puntos siendo la octava peor defensa de toda la NBA.
La evidencia es que el equipo hace aguas se mire por donde se mire y que LeBron podría sumar su segunda temporada en cuatro años sin pisar los Play-Offs con la mítica franquicia. Los problemas del equipo podrían derivar en otro verano loco de traspasos, aunque cada vez hay menos jugadores que se sientan atraídos por jugar junto a James dado que su efectividad para llegar a las finales de NBA está disminuyendo. Veremos qué sucede en los siete partidos que restan, pero de no clasificarse pueden temblar los cimientos en la franquicia más laureada junto a los Boston Celtics.