En ese nivel están los dos grandes de Inglaterra en estos momentos. Ya nos dejaron dos partidos memorables en la Premier en la primera vuelta en Anfield y en la segunda en el Etihad, y ahora vuelve a verse las caras en Wembley por un puesto en la gran final copera.

Cuando hablamos de dos equipos y dos técnicos que optan a todos los títulos, es normal que se crucen cuando llega el momento decisivo de la temporada. Ocurre en la Premier, con una colosal disputa por el campeonato, y se repite en la FA Cup. Es más, no es nada descartable que ambos puedan dilucidar la Champions en la gran final de París, aunque para ello deberán eliminar a los supervivientes de LaLiga, Madrid y Villlarreal respectivamente (resultado al descanso empate se paga 2.2 a 1).

A un partido y en sede neutral cualquier cosa puede pasar entre estos dos súperequipos. El City se ha caracterizado por ser más regular, más de temporada larga; el Liverpool es quizá más copero, un equipo difícil de superar a eliminatorias. Ya ganó así la Carabao Cup esta temporada y aspira a repetir en los torneos del KO que tan bien se le dan a Klopp.

Igual que decimos siempre, el técnico alemán es el que más ha complicado a Guardiola estos últimos años. Le ganó nueve veces, más que nadie, y convirtió la lucha encarnizada entre ambos en Alemania y ahora en la Premier en la disputa más intensa entre dos técnicos que pueda haber en Europa. El propio Pep ha reconocido que nunca ha tenido un rival de la enjundia de Klopp enfrente.

Ecos de la batalla de Madrid

La mala noticia de Guardiola es que el partido en Madrid ante el Atlético en la vuelta de lo cuartos de Champions puede pasar factura a su equipo. Perdió por lesión a Walker y veremos si a De Bruyne, además de continuar con Rúben Días lesionado a la espera del ansiado alta. Tendrá que tirar de fondo de armario, que lo tiene, para armar un once competitivo (no marcan ambos equipos se paga 2.35 a 1).

El Liverpool llega más entero. Klopp utilizó la vuelta ante el Benfica para dosificar fuerzas. Puso siete suplentes como titulares y mantiene a plenitud de forma a sus cinco excelentes delanteros. Sólo podrán jugar tres, pero cualquiera de ellos es un dolor de muelas para el City. Una semifinal tremenda por un puesto en la final; un partido que puede denominarse como el mejor de Europa, lo que le da una dimensión enorme a la FA Cup.