El Real Madrid empezó de la mejor manera posible la temporada. Los blancos se adjudicaron su quinta Supercopa de Europa frente a un Eintracht que poco o nada tuvo que hacer ante los experimentados jugadores madridistas. Kroos, Modric y compañía les dieron un clínic de fútbol en Helsinki.

El triunfo sirvió al Real Madrid para embolsar 4,5 millones de euros en un 'bolo' veraniego más para sus arcas. Los blancos, que cobraron cinco millones por cada uno de los partidos de su gira norteamericana, terminan el verano con un balance positivo de 19,5 millones.

El hecho de clasificarse para este torneo -que mide al campeón de la Champions League con el de la Europa League- ya otorga a los participantes una bolsa de 3,5 millones de euros con el ganador teniendo un premio adicional de un millón de euros.

Premios y más premios

El Real Madrid, en virtud a su holgado triunfo sobre su rival alemán, ha conseguido una buena bolsa, pero ni mucho menos la mejor que hay en este tipo de torneos. El año pasado, por la Supercopa en Arabia Saudí, se llevó también 7 millones por su triunfo frente al Athletic.

Hay que recordar que los blancos se embolsaron la mayor parte del dinero proveniente de la última edición de la Champions League. Por ganar este torneo, el club presidido por Florentino Pérez accedió a unas cantidades que superaron los 120 millones de euros y eso sin contar todavía un market-pool que es oscilante y que le podría dar un extra de cinco millones.

Los blancos, con estos números sobre la mesa, presentan un claro superávit en las cuentas y no tienen necesidades económicas como sí sucede con su eterno rival, el Barcelona. El Real Madrid ha conseguido la sostenibilidad gracias a una gran gestión económica, pero también por unos premios a los que ningún club puede aspirar.