Carlos Sainz salva el honor de Ferrari
Otra nefasta carrera de los italianos culminó con un tercer puesto de Sainz y un sexto de Charles Leclerc. Red Bull juega en otra liga
Max Verstappen se ha aficionado a esto de las remontadas. Después de salir décimo en Hungaroring y terminar ganando, el holandés superó su listón más alto remontando desde la decimoquinta posición en la parrilla de salida para terminar primero en Spa-Francorchamps.
Al vigente campeón del mundo le sobraron hasta vueltas, puesto que en la 18 ya iba líder tras rebasar con pasmosa facilidad al Ferrari de Carlos Sainz. El madrileño lo dio todo, pero se vio perjudicado por la mala lectura de su equipo una vez más desde el muro.
Los italianos llevaron durante toda la carrera una degradación extrema que sólo acertaron a darse cuenta de ella cuando se había pasado el ecuador del Gran Premio de Bélgica. Los neumáticos duros fueron los únicos que valieron a un Sainz que, al menos, salvó el podio cuando parecía que George Russell y su Mercedes le pasarían en las últimas vueltas.
Red Bull no sólo sumó un doblete en Bélgica, sino que dio la estocada definitiva al Mundial de Fórmula 1 colocando a Checo Pérez como segundo del campeonato por detrás de un Verstappen que saca 98 puntos a Leclerc. Si al holandés le damos un Williams de aquí a final de temporada dudamos que el líder de Ferrari le pueda pasar en el Mundial.
Ahora el bueno de Charles deberá mirar al retrovisor con un Carlos Sainz que le ha apretado las tuercas hasta ponerse a 15 puntos. Es cierto que el monegasco también fue víctima del exceso de ambición de Ferrari, quien le hizo entrar en la penúltima vuelta al box en busca del punto de la vuelta rápida de carrera.
Alonso, indestructible
Leclerc no pudo arrebatar a Verstappen la vuelta rápida y por si fuese poco fue sancionado con cinco segundos por ir más rápido de la cuenta dejando la quinta posición que había conseguido en la pista para Fernando Alonso. El asturiano tuvo una carrera de esas que no se olvidan.
Salió como un misil colocándose en segundo puesto en las primeras curvas tras Carlos Sainz. Todo iba bien hasta que Lewis Hamilton le metió el coche en un lugar imposible sufriendo ambos una colisión. El español pudo seguir, mientras que el líder de Mercedes se vio obligado a abandonar tras saltar por encima del Alpine.
El equipo francés puso tierra de por medio con McLaren en su guerra por el Mundial de constructores incrementando su ventaja hasta los 20 puntos en esta suerte tras ver cómo sus dos pilotos puntuaban, mientras que los ingleses se quedaban a cero. La semana que viene veremos un previsible baño de masas para Max Verstappen en su tierra natal.