Bagnaia deja encarrilado el Mundial y Márquez vuelve a un podio
El italiano Pecco Bagnaia arrebató el liderato de MotoGP a Fabio Quartararo en el Gran Premio de Australia y podría proclamarse campeón en la próxima carrera
El Mundial de MotoGP tiene nuevo líder y apenas faltan dos carreras para el final. Phillip Island confirmó la tendencia que llevábamos viendo desde el parón veraniego con una remontada espectacular de Pecco Bagnaia en la clasificación hasta alcanzar el sitio de Fabio Quartararo en lo más alto.
El italiano lideró gran parte de la carrera en el trazado australiano, pero en la última vuelta decidió no arriesgar dejando que Alex Rins y Marc Márquez se disputasen un triunfo que recayó en el piloto de Suzuki. Para el líder de Ducati, el botín ya era muy grande gracias a la caída de un Quartararo que no es capaz de domesticar a la Yamaha.
Así las cosas y viendo las tendencias, no sería de extrañar que Bagnaia no tenga ni que esperar a la carrera final en el trazado valenciano de Cheste para conquistar su primera corona. El italiano aventaja en 14 puntos a Quartararo y en 27 a Aleix Espargaró. Quizá lo único que pueda quitarle el título sea una caída.
La siguiente carrera será la próxima semana en Sepang (Malasia) en un lugar donde varios pilotos que no se juegan nada en el Mundial podrían tener su influencia como ya ha sucedido en esta carrera. Todos los focos señalan a un Marc Márquez que ha recuperado el toque y que buscará su primera victoria de la temporada tras lograr en Australia su mejor resultado de 2022.
Márquez, on fire
Inevitablemente todos pensamos en la influencia que tuvo el ilerdense en el título mundial de 2015 cuando en una secuencia parecida se picó con Valentino Rossi para privarle de su décimo título y recayendo éste en Jorge Lorenzo. La carrera de la patada del italiano es un clásico histórico en MotoGP.
Márquez está resucitando a una Honda que ahora sólo piensa en subir posiciones en el Mundial de Constructores. El '93' está a tiempo de meter a su equipo entre los seis mejores de la competición tras un año para olvidar en el que marchan en novena posición. El equipo japonés necesita que su líder dé la cara.
Alex Rins, el ganador de la carrera, quiere fortalecer su posición como líder de las Hondas satélite en la próxima temporada en la estructura que lidera Lucio Cechinello. Para ello triunfos como este pueden elevarle a una posición de fuerza para el futuro.
Ducati intentará seguir escoltando a un Bagnaia que no se va a calentar en lo que resta de Mundial sabiendo los problemas de rendimiento de la Yamaha de Quartararo. El italiano podría terminar de culminar una de las remontadas más grandes de todos los tiempos en el Mundial de MotoGP.