Bagnaia tiene match-ball para ganar el Mundial
Si el piloto de Ducati gana el Gran Premio de Malasia y Fabio Quartararo queda fuera del podio se proclamará automáticamente campeón del mundo
Vuelve la NBAPecco Bagnaia toca con la yema de los dedos hacer historia en el Mundial de MotoGP. El italiano está a punto de culminar una remontada de 91 puntos en la general para adjudicarse su primer título en la máxima categoría. Venciendo en Malasia, el de Ducati lo tendría casi hecho, pero todo depende su rival Fabio Quartararo.
El trazado asiático posee dos rectas gigantes que favorecen a su moto y debería poder dominar la carrera de principio a fin con su enorme velocidad punta. Bagnaia ha ganado esta temporada seis carreras siendo la gran sensación de la segunda parte de la temporada con una racha de cuatro triunfos seguidos que ni el mismísimo Casey Stoner había conseguido con Ducati.
En la marca italiana las órdenes de equipo son claras para favorecer el título mundial de un Bagnaia que tendrá unos cuantos escoltas intentando dejar fuera del podio a su gran enemigo Fabio Quartararo. El francés ha visto cómo le han robado la cartera en la cabeza del Mundial por culpa del bajo rendimiento de su Yamaha.
Bagnaia ha terminado en tercera posición en las últimas dos carreras y este puesto le valdría para ser campeón siempre y cuando Quartararo esté fuera del top-10. La calculadora nos muestra también que hay que contar con un tercer actor en la figura de Aleix Espargaró, quien marcha tercero en el Mundial a 27 puntos del líder por los 14 de desventaja de Quartararo.
Entre las hipótesis, si Bagnaia acaba segundo, necesita que Quartararo acabe séptimo o peor y que Aleix Espargaró no gane la carrera. En el caso de que Bagnaia lograse la cuarta posición, Quartararo no debiera pasar de la decimocuarta y Espargaró no puede colarse el podio para terminar siendo campeón.
La presión está en un Bagnaia que no quiere llegar a la última carrera en Valencia sin los deberes hechos. También hay que resaltar que debería evitar unas caídas que han hecho acto de presencia en cinco de las 18 carreras en esta temporada. Un cero sería la única opción real de que Quartararo y Espargaró tengan opciones para la última ronda.
El juez Marc
En medio de todo este escenario de cuentas aparece un Marc Márquez que puede ser juez final del Mundial como ya fue en 2015 en este mismo trazado con la famosa patada de Valentino Rossi. El ilerdense hizo su mejor resultado en la anterior carrera en Australia alcanzando la segunda posición y quiere más.
Es verdad que a la Honda se le puede hacer complicado un trazado con muchas rectas, pero el talento de Marc y sus ganas de no acabar la temporada sin ganar ni una carrera pesan mucho para el futuro de Bagnaia. Al italiano ya se le vio en Australia no arriesgar ni lo más mínimo cuando Rins y Márquez le adelantaron en la última vuelta y puede que aquí nos encontremos algo parecido. Preparen la calculadora porque quizá tendremos nuevo campeón.34