Domingo, 1 de agosto, 10:20 horas

Luka Doncic se cruza en el camino de España y lo hace en un momento de forma pletórico. Tras casi batir el récord de puntos en un partido en los Juegos Olímpicos, el esloveno pretende ahora liderar a su selección a la primera posición del grupo C del torneo de Saitama y así asegurarse evitar a Estados Unidos en el cruce. Los norteamericanos, al ser los mejores segundos del torneo, se aseguraron ir junto a los cabezas de serie consiguiendo así un cruce más benévolo en los cuartos de final.

La traducción de esta situación es que Italia o el perdedor de este partido se verán con los norteamericanos en el partido de cuartos de final. España ya sabe cómo se las gastan los norteamericanos en unos cuartos olímpicos tras caer en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 tras hacer un gran torneo. Los nuestros tendrán que hacer frente a una estadística que es bastante aplastante: Doncic jamás ha perdido un partido con la selección eslovena y ya va 15-0 con ellos.

Se enfrentan dos estilos diametralmente opuestos. Eslovenia promedia 117 puntos en sus dos primeros partidos y juega a más posesiones que nadie en todo el torneo. España, por su parte, se ha mostrado como una máquina letal a la hora de defender y desactivar rivales. ¿Ganará la pujanza balcánica o la veteranía ibérica?

Según Betfair, el equipo de Luka Doncic es favorito, aunque no por mucho a llevarse el gato al agua a cuota 1.54 el triunfo. Nos parece que está bien tirada la línea, aunque apostar por España en el día D nunca ha sido una mala idea y si se presenta a cuota 2.45 vamos bastante bien.

El mercado nos trae quizá una de las gangas del año con la línea de puntos de este encuentro. Que haya más de 177.5 puntos se paga a 1.88 y creemos que hay que darlo todo por esta cuota porque Eslovenia no va a cambiar su estilo rápido jugando a más de 100 puntos, mientras que España promedia 84,5 tantos por choque. Si Eslovenia parte como favorita, sin duda, hay que tirar por la línea de más puntos para llevarnos un buen pellizco.

España y Eslovenia se miden en un duelo donde tienen cuentas pendientes, pero más allá del morbo añadido se encuentra la opción de evitar a Estados Unidos por el camino. Pau Gasol ya sabe cómo se las gastas los equipos norteamericanos que vienen con debilidad siendo capaces de lo mejor y de lo peor. El partido se tiene que tomar como el de octavos de final si la roja quiere salir triunfal.