El 'Ingeniero del gol', uno de los mejores jugadores de la historia del Atlético de Madrid
Recordamos a uno de los futbolistas que ha marcado el sino del club colchonero en sus 120 años de vida.
Don José Eulogio Gárate, argentino, nació un 20 de septiembre de 1944. Su familia tuvo que huir de España por la guerra (su abuelo fue teniente alcalde de Eibar en el bando republicano) y se marcharon a tierras albicelestes . Sin embargo, al año siguiente de nacer Gárate, volvieron a tierras vascas. Allí comenzó la historia futbolística del que se convertería en uno de los mejores jugadores de todos los tiempos del Atlético de Madrid.
Cuando estaba en el juvenil del Eibar, compaginaba sus estudios con el fútbol, por lo que apenas podía entrenar. Después fichó por el Indautxu bilbaíno. Allí marcó 17 tantos en 26 partidos en Segunda división (1965-66), de la mano de Ferdinand Daučík, que a la postre sería clave para su fichaje por el Atlético de Madrid.
Él mismo contó en una entrevista en Jot Down que siempre quiso jugar en el Athletic, pero algo se lo impidió: "Yo era de pueblo, del norte, y quería estar en el Athletic. Era el equipo de nuestro entorno, de la zona, el equipo de los vascos, y ellos querían ficharme. El problema fue que para fichar por el Athletic me tenía que hacer español. Yo había elegido la nacionalidad argentina porque la mili me parecía una pérdida de tiempo".
"Yo no tenía ningún problema en hacerme español, pero no quería ir al servicio militar. Llegar a Madrid me causó gran impresión. Era un 25 de julio. Hacía un calor horroroso para alguien que llegaba del norte. Pero gracias a Dios todo fue muy bien", añadió. Y es que en 1966 desembarcó en el equipo que acabaría siendo su casa: el Atlético de Madrid.
La forja de una leyenda
Fue internacional en 18 ocasiones y con su club marcó época. Consiguió tres trofeos Pichichi que le ensalzan incluso a día de hoy: uno en la temporada 1968-69, otro en la 1969-70 y otro en la 1970-71. Solo Leo Messi (8), Telmo Zarra (6), Alfredo Di Stéfano, Quini y Hugo Sánchez (5) y Ferenc Puskás (4) tienen más pichichis que Gárate, empatado a tres con Cristiano Ronaldo e Isidro Lángara.
En un partido ante el Elche en 1976 sufrió una dura entrada que le produjo un corte en la rodilla. De aquello se recuperó, pero más adelante se encontró un hongo llamado Monosperium Apiospermun. Le acabaron dando un medicamento experimental que ni siquiera estaba aprobado en España. Le curó, sí, pero le dejó la rodilla destrozada.
Futbolista e ingeniero
Ahí se acabó su carrera, pero no su leyenda. Su apodo, el Ingeniero del Gol, dejaba claro lo aplicado que era dentro y fuera del terreno de juego. Estudió la carrera de ingeniería industrial mientras desempeñaba su labor sobre el césped y cuando se retiró llegó a trabajar de ello. Una historia de superación inigualable.