Los calambres terminaron demasiado pronto con la participación de Carlos Alcaraz en Roland Garros. El murciano era el principal favorito a ganar el segundo Grand Slam del año, pero tendrá que esperar al menos un año para poder reinar de una vez en la tierra de Rafael Nadal.

Sin embargo, terminada la temporada de tierra batida, se abre un nuevo horizonte para el español, que ahora apunta a la gira de hierba para seguir sumando éxitos.

APENAS CUATRO SEMANAS DE COMPETICIÓN

Esta comprende apenas unas pocas semanas, por lo que Alcaraz, de recuperarse bien de sus heridas de París, apenas disputará dos torneos.

Uno será Queen's, donde está apuntado como principal candidato desde hace varios meses, y que se jugará del 19 al 26 de junio. Es la antesala de Wimbledon y un torneo que Alcaraz ya se perdió la temporada pasada por unos problemas en el codo. Ahora tiene una semana para recuperarse y poder estar en este ATP 500, donde, con el título, superaría a Novak Djokovic en el primer puesto del ránking.

En caso de no ganar, Alcaraz llegará como número dos a Wimbledon, el gran objetivo de la gira. Ahí el murciano ya sabe lo que es ganar partidos en dos años consecutivos; en 2021 hizo segunda ronda y en 2022 llegó hasta octavos de final, donde le frenó Jannik Sinner.

Otra opción, algo más remota, es que si no se ve a tono para jugar en Queen's, Alcaraz podría recurrir a las exhibiciones que se disputan en Londres. Una de ellas es la de Boodles, con tenistas como Stefanos Tsitsipas y Felix Auger-Aliassime, y la otra es Hurlingham, donde ya jugó el año pasado dos partidos contra Frances Tiafoe y Casper Ruud.